¿Puede presentarse y explicar su trayectoria?
Me hice cargo del negocio familiar de bisutería, Anica, en 2020. Habiendo crecido en el mundo de la fundición y la orfebrería junto a mis padres, aprendí el oficio junto a ellos. Cada etapa de este aprendizaje y cada momento de formación continua han contribuido a dar forma a una habilidad preciosa: la creación de joyas únicas transmitidas de generación en generación. Entre el taller de Percy y la tienda de Villedieu-les-Poêles, me esfuerzo por perpetuar la herencia familiar. Este taller era el establo de mi abuelo, donde cuidaba de los caballos. Para mí, trabajar aquí era una elección obvia.
¿En qué consiste su trabajo?
Llevo muchos sombreros. Soy creadora, dibujante y diseñadora de las colecciones de joyas. También soy orfebre de modelos, lo que implica realizar el prototipo que se utilizará para hacer un molde. Luego me convierto en moldeador y fundidor para producir las joyas con una aleación de estaño.
¿Qué técnicas utiliza?
Soy cincelador, grabador, escultor, pulidor, engastador, esmaltador, moldeador, fundidor y soldador. Así que utilizo todas las técnicas específicas de estas profesiones. Encuentro en mi trabajo el placer de crear yo mismo objetos, cada uno de ellos único. Hacer joyas originales requiere una gran concentración y me exige poder despejar la mente para ser preciso en mis gestos técnicos. El trabajo de fundición y orfebrería es a la vez técnico y artístico. Disfruto con esta combinación de conocimientos técnicos, diseño, investigación de ideas y tendencias. Es esta versatilidad y estas infinitas posibilidades lo que dan encanto a mi trabajo.