¿Puede presentarse y explicar su trayectoria?
Me llamo Angélique Chéreil. Después de estudiar diseño de productos, seguí un curso para aprender las técnicas de la cerámica. Durante 15 meses perfeccioné mis conocimientos en este campo y obtuve dos CAP (ceramista y decoradora). Combinando mis conocimientos de diseño y cerámica, pude desarrollar una gama de productos cuyo principio rector era resaltar las características plásticas y técnicas de la arcilla. Unas semanas después de terminar mi formación, me instalé en el barrio de artesanía de Villedieu-les-Poêles, en el número 20 de la calle Carnot.
¿En qué consiste su trabajo?
Soy diseñadora de cerámica. Diseño y fabrico objetos de arcilla. El gres, concretamente, se cuece dos veces y se esmalta para solidificarlo y hacerlo apto para el uso cotidiano. Hago tazas, cuencos, teteras, jarras, cajas, jarrones y muchos otros tipos de objetos…
¿Qué técnicas utiliza?
Todas las piezas que hago están torneadas, y la mayoría están decoradas con arcillas que recojo de la naturaleza. También hago mis propios esmaltes, algunos con arcilla y/o ceniza de madera.
¿Cuáles son sus creaciones características?
Ofrezco piezas tanto utilitarias como ornamentales. La taza de café expreso, con su piecito que la eleva, es una de mis piezas emblemáticas. Esta pieza me permite explorar la investigación del esmalte, incluidos los esmaltes de ceniza y arcilla. Le sigue de cerca la copa, que es bastante representativa de mi trabajo. Se presenta en varios modelos, y encuentra su singularidad en la banda de arcilla texturada de su base. En cuanto a las piezas decorativas, destaca la decoración en arcilla fundida y cloisonné de jarrones de formas variadas, siempre geométricas.